La Rosca | Gestiones |
En las últimas elecciones de 2023 se terminaron 20 años consecutivos de gestiones justicialistas en la provincia. Sin liderazgos provinciales a la vista, Rosario Romero se ha trasformado, por el peso electoral que representa la capital provincial, en la referente de mayor músculo político dentro del peronismo entrerriano en la actualidad. Por eso, los ojos están puestos en la relación con el referente más importante de Juntos por el Cambio, el gobernador Rogelio Frigerio (y sus funcionarios).
Tal vez, el ajuste económico que está ejerciendo el presidente Javier Milei mediante recortes de fondos y obras a provincias y municipios los haya acercado más de la cuenta, o simplemente obedezca a vínculos previos que allanan el camino hacia una relación institucional fuera de la habitual puja partidaria que caracteriza a los dirigentes políticos en todos los ámbitos.
En cualquier caso, desde el 10 de diciembre del año pasado, Rosario Romero y Rogelio Frigerio vienen demostrando un trato cercano, incluso mayor al que tienen intendentes del propio espacio del gobernador. De hecho, a principio de marzo, Frigerio acompañó a Romero en la apertura de sesiones del Concejo Deliberante de Paraná y hace pocos días volvieron a reunirse en la Casa Gris para abordar temas de gestión.
Este jueves, la intendenta de Paraná mostró en sus redes sociales una foto distendida junto al ministro de Gobierno de la provincia, Manuel Troncoso y un detalle breve de la reunión: “Recibí esta mañana al Ministro de Gobierno y Trabajo Manuel Troncoso, nos reunimos con el fin de tratar varios temas de agenda institucional y de gestión entre el Municipio y el Gobierno provincial”.
También hoy, estuvo con el ministro de Seguridad Néstor Roncaglia en la entrega de cascos para la guardia urbana de la ciudad.
El portal oficial del gobierno provincial destaca el encuentro y describe que la entrega se realizó en el marco del programa del Observatorio Provincial de Seguridad Vial, que funciona bajo la órbita del Ministerio. Luego, Romero valoró que “el gobierno provincial siga sosteniendo este vínculo tan virtuoso entre lo que es el Estado y el cumplimiento de la Ley Nacional de Tránsito”.
Claramente, que no haya elecciones este año distiende las lógicas tensiones partidarias. Por el momento, el clima de sintonía fina entre los dirigentes con mayor peso político de la provincia parece no correr riesgos.
